La representación de la educación socialista en Acción Femenina y Juventud, Guadalajara 1934-1940

Abstract

La movilización de mujeres católicas durante el cardenismo responde a tres cuestiones principales, las dos primeras relacionadas al conflicto político-religioso: los “arreglos de 1929” y la instauración de la educación socialista. La tercera está vinculada a la construcción de su identidad como militantes católicas. Los “arreglos” fueron un concordato de paz entre la jerarquía católica y el Estado para dar fin al movimiento cristero. No obstante, este acuerdo entre el clero y el gobierno no fue satisfactorio para el Papa (Pío XI), ya que, tanto la Santa Sede desde Roma como el gobierno mexicano pretendían consolidar su influencia en la sociedad mexicana. Lo que permitió en la década de 1930 el desarrollo de diversos sucesos que llevaron a un nuevo enfrentamiento entre la Iglesia católica y el Estado, el más significativo fue la implementación de la educación socialista por Lázaro Cárdenas en su periodo presidencial. Uno de los fines de este método pedagógico basado en el socialismo soviético era des fanatizar a las masas para lograr el progreso social de la nación. Lo que significó para la comunidad católica un nuevo ataque a su libertad religiosa y de cátedra. Ante tales circunstancias, el Papa convocó a los seglares, en particular a las mujeres católicas para hacer frente a tal sistema de enseñanza; las reorganizó en su proyecto de Acción Católica Mexicana (ACM) con el fin de trabajar por dos propósitos: restaurar la influencia religiosa en la sociedad y combatir la educación socialista.