Participar a contracorriente: la herejía del g-20 en Cuba. Lo público no estatal y los actores sociales en función de la promulgación de una ley de cine.

Abstract

En 2013 Cuba buscó unirse a los debates regionales sobre la necesidad de legislar políticas culturales desde el compromiso con los actores sociales implicados. Un grupo de cineastas autodenominados g-20 impulsó, en representación del gremio, la promulgación de una ley cinematográfica para ordenar y proteger dicha actividad artística y económica en concordancia con las dinámicas industriales contemporáneas y a raíz de la reconfiguración del contexto nacional. La presente tesis analiza la experiencia participativa del colectivo a partir de diversos referentes de la teoría social vinculados con lo público, el asociacionismo y la participación. Estos posicionamientos epistemológicos funcionan para entender al g-20 como una expresión de lo público no estatal, concepto central de la investigación que permite estudiar las negociaciones con el Estado, indagar en la constitución del grupo, su breve permanencia, los alcances de su participación y significados de su acción vinculados con las posibilidades de influir críticamente sobre el aparato estatal. Basada en un diseño metodológico cualitativo, los resultados de la investigación se construyen con base en entrevistas semiestructuradas y gracias al análisis de los documentos generados por los sujetos de estudio. Entre las principales conclusiones cabe resaltar que las posibilidades de innovación del g-20 están constreñidas por los límites que opone el diseño institucional del sistema cubano, a pesar de los capitales culturales del grupo, devenido hasta su disolución en una de las identidades autónomas más visibles dentro del espacio asociativo cubano. Asimismo, su articulación prefigura una gama de tensiones e interacciones entre el Estado y las nuevas subjetividades emergentes.