REMODELACIÓN DEL PARQUE EL DEÁN EN GUADALAJARA

Abstract

La necesidad del hombre para su supervivencia ha sido siempre el esfuerzo físico. En tiempos primitivos tuvo que recurrir a su fuerza para conseguir alimento, ropa y habitación, en competencia desigual comparada con los animales. Por ende, tuvo que desarrollar su ingenio para suplir la falta de elementos para la defensa y el ataque, así como para cubrirse de las inclemencias del tiempo, lo que lo llevo en busca del dominio de su medio ambiente en lucha de mejorar sus condiciones de vida. Con el tiempo y el avance de la tecnología, el hombre cada día recurre menos a su fuerza para conservar su salud y evitar el deterioro anticipado de su cuerpo, entonces recurrió al deporte como medio normal de desfogue y entretenimiento”.1 Son los parques sitios destinados para el deporte como puntos estratégicos de encuentro social, que permiten que el hombre siga en contacto con la naturaleza, sin embrago pocos de ellos cuentan con el diseño idóneo para la demanda de una sociedad en constante crecimiento que carece de espacios destinados a una actividad tan natural y benéfica para el hombre, como lo es el deporte. Se cree importante entonces que en un ámbito donde la industria ha llegado a establecer las condiciones de vida, debe existir o procurarse un medio que lo contraste. Una manera de promover la sana convivencia y el deporte, para de esta manera interrelacionar al usuario con su medio natural más próximo.