Análisis toxicológico de plaguicidas en roedores del valle agrícola Autlán-El Grullo-El Limón, Jalisco.

Abstract

El valle agrícola Autlán-Grullo-Limón es uno de los principales motores económicos de la región, sin embargo, el aumento excesivo en la cantidad, frecuencia y aplicación de plaguicidas dentro del valle agrícola ha generado efectos nocivos en la matriz ambiental y en el ser humano. Es sabido que aquellos organismos que están expuestos constantemente a plaguicidas, pueden presentar problemas en su desarrollo, crecimiento, reproducción y sobrevivencia. Sin embargo, algunos productores emplean abonos orgánicos en sus cultivos con la intención de reducir el impacto y daño ambiental. El objetivo de la presente investigación fue analizar la concentración de plaguicidas en fauna silvestre, tomando como especie indicadora a los roedores silvestres. Éstos se colectaron dentro del valle en dos tipos de producción agrícola: cultivo convencional (uso extensivo de agroquímicos) y alternativo (abonos orgánicos), y como tratamiento control se capturaron roedores en selva baja. Se colectaron 120 individuos de 10 especies de tres familias, las especies con mayor número de capturas fueron Heteromys pictus y Reithrodontomys fulvescens. Se colectó hígado y riñón para la extracción, identificación y cuantificación de plaguicidas utilizando un procedimiento de lixiviación de plaguicidas hacia una fase acuosa, seguida por un proceso de extracción en fase sólida y cromatografía líquida acoplada a espectrometría de masas-masa. Se realizó un análisis estadístico con datos censurados a la izquierda y en función del porcentaje de censura de cada plaguicida se determinó el tipo de prueba (50% KM). En los plaguicidas donde se presentó el 100% de detección se realizó ANOVA o Kruskal Wallis con la finalidad de observar diferencias significativas con el tipo de producción, tipo de cultivo, temporada y tejido. Se determinó la presencia de ocho plaguicidas, cuatro herbicidas (ametrina, atrazina, molinato y picloram), tres insecticidas (carbofurano, diazinón y malatión) y un funguicida (tiabendazol). El plaguicida con mayor concentración fue la herbicida atrazina con 11,759 μg kg-1, seguida por el insecticida malatión con 4,973 μg kg-1 y carbofurano con 4,775 μg kg-1. Las concentraciones más altas de plaguicidas se detectaron en sitios de selva baja y cultivos convencionales, sin embargo, no se registraron diferencias significativas. La mayor presencia y concentración de plaguicidas se registró en temporada de lluvias, dónde el molinato registro diferencias significativas. En las muestras biológicas, solo picloram registró diferencias significativas a mayor tendencia en riñón, sin embargo, descriptivamente se registró mayor concertación en hígado. Los resultados permiten reconocer a los roedores como bioindicadores de contaminación ambiental, al indicar procesos de perturbación o disturbios en los hábitats por actividades antropogénicas. La presencia y concentración de plaguicidas no influyeron en el sitio de captura, temporada ni tejido. Esto debido a que no se encontraron diferencias significativas en más del 80% de los plaguicidas registrando un comportamiento pseudopersistentes espacio-temporal. La exposición aguda a plaguicidas puede afectar negativamente su dinámica poblacional causando efectos nocivos. Además, debido a las propiedades intrínsecas de los plaguicidas se logran biomagnificar a través de los niveles superiores de las redes tróficas. El uso de hígado y riñón de roedores para el monitoreo de plaguicidas es un método invasivo, pero con gran certeza y confianza para evaluar el grado de exposición a plaguicidas, además, puede utilizarse para determinar sitios con problemas de contaminación.